El concejal de Arriba Chubut se refirió a la obra pendiente en el Estadio del Centenario y a la necesidad de avanzar también con proyectos estructurales para evitar nuevas inundaciones en Comodoro Rivadavia.
En diálogo con Jornada Radio, el concejal de Arriba Chubut, Ariel Montenegro, confirmó que el convenio para retomar las obras en el Estadio del Centenario ingresó al Concejo Deliberante y será tratado formalmente el próximo 24. Se trata de una renegociación con la empresa a cargo que contempla una inversión cercana a los 1.068 millones de pesos.
“El presupuesto corresponde a valores de diciembre de 2024, no fue actualizado. 400 millones serán destinados al cerramiento perimetral del estadio y 600 millones a mejoras internas”, detalló el edil, quien además remarcó que esta etapa forma parte de una promesa de gestión que debe cumplirse. “Si no avanzamos ahora, volvemos a perder el uso del estadio. Todos queremos que se termine de una vez”, afirmó.
Montenegro, quien también integra la UOCRA, valoró el impacto laboral que implicaría la obra: “Hablé con Raúl Silva y se estima que trabajarán entre 50 y 70 operarios durante cuatro meses. Pero nuestra meta es generar más empleo, porque hoy tenemos cerca de 2.000 desocupados en el sector de la construcción”.
Respecto a las críticas sobre la prioridad de esta inversión, el concejal reconoció la preocupación social, pero aclaró que también se está avanzando en proyectos para obras pluviales.
“Se está preparando una intervención en la avenida Chile, desde Kennedy hasta Nación, con un presupuesto estimado de 500 millones de pesos para nuevos sumideros. No es la solución definitiva, pero ayuda a evitar futuras inundaciones como las que vivimos semanas atrás”, explicó.
En cuanto a las obras mayores pendientes, Montenegro mencionó gestiones para concretar intervenciones claves en avenidas como Roca y recordó compromisos del gobernador en rutas como la 87 y el acceso por San Juan.
El convenio para la obra del Centenario ingresará al Concejo el próximo jueves 24 de abril y se prevé que, una vez en estado parlamentario, se inicie el tratamiento en plenarios para su eventual aprobación.