Sebastián Aguirre, presidente de la Cámara de Comercio de Comodoro, analizó las ventas por el Día del Padre y advirtió una baja incidencia económica de la fecha. También habló del impacto de la crisis petrolera en el comercio local.
El Día del Padre no movió el amperímetro comercial en Comodoro
Sebastián Aguirre, presidente de la Cámara de Comercio de Comodoro Rivadavia, ofreció un crudo diagnóstico sobre el movimiento comercial registrado durante el fin de semana del Día del Padre. En diálogo con la prensa, explicó que las ventas no alcanzaron las expectativas, en sintonía con lo relevado a nivel nacional.
“El número final fue apenas un 1% por encima del año pasado. Si lo comparamos con años anteriores, seguimos en un nivel bajo, muy complicado”, precisó el dirigente, en base al muestreo que la Cámara local realiza junto a CAME.
Aguirre lamentó que la fecha esté perdiendo peso como hito económico y comercial:
“Nos están arreglando con chucherías. Es una fecha que ya no tracciona como lo hacían históricamente otras, como el Día del Niño o el de la Madre”.
Cambios en el consumo: menos gasto, más símbolo
El promedio de tickets en Comodoro osciló entre los 20.000 y 40.000 pesos, con una leve suba en artículos electrónicos, pero un fuerte descenso en rubros como indumentaria.
“Hoy se privilegia más la reunión familiar y el gesto simbólico que el regalo costoso. El Día del Padre ya no mueve la aguja como antes”, explicó Aguirre.
Aunque hubo movimiento comercial el viernes y sábado previo a la fecha, no fue suficiente para compensar la caída sostenida del consumo.
Día del Niño y Día de la Madre, los únicos que sostienen ventas
Consultado sobre las fechas que todavía tienen impacto económico, Aguirre señaló:
“El Día del Niño sigue siendo fuerte en jugueterías e indumentaria, y el Día de la Madre se mantiene estable. El resto, como Reyes o el Día de la Secretaria, perdieron peso”.
Crisis petrolera y su impacto en el comercio local
Más allá del análisis puntual, Aguirre también se refirió a los coletazos que la crisis de la industria petrolera ya empieza a generar en el comercio de la ciudad.
“Comodoro es altamente dependiente de la actividad petrolera. Cuando cae el nivel de actividad, el comercio es uno de los primeros en sentir el impacto”.
Según explicó, ya se observan cierres de locales, cambios de rubro y nuevos emprendimientos impulsados, en algunos casos, por indemnizaciones tras retiros voluntarios en el sector petrolero.
Reconfiguración y nuevos hábitos comerciales
Otro fenómeno que señaló el titular de la Cámara es el aumento de ventas informales y modalidades no tradicionales:
“Hay mucha actividad en marketplaces, showrooms sin habilitación comercial y ventas por canales digitales. Son nuevas formas que reflejan la crisis, pero también una adaptación”.
Aguirre aseguró que la Cámara no cuenta con datos precisos sobre cuántas personas abren locales tras ser desvinculadas del sector petrolero, pero afirmó que se está viendo una rotación y renovación constante en los espacios comerciales.
En su análisis final, el presidente de la Cámara remarcó:
“Estamos en un primer estadio de una crisis más profunda. Aún no vemos un escenario de recuperación, y el principal desafío es sostener el nivel de empleo”.
Desde la entidad, insisten en la necesidad de políticas que ayuden a mantener el nivel de actividad económica, ante una situación compleja que no parece tener una salida clara a corto plazo.
