El hecho ocurrió en la madrugada del domingo en la Fundación Crecer, que gracias a los sensores de la alarma y el rápido accionar policial, encontraron un hombre escondido debajo de un escritorio.
Cuando la policía llegó al lugar no habían notado la presencia del sujeto, pero al ver la puerta trasera rota, llamaron a un responsable y mientras se constataban faltantes, notaron que se encontraba el malviviente en el interior de Fundación Crecer. Quedó detenido y no hubo elementos faltantes.